Hoy he leído un pequeño articulo de Frank Close en el CERN Bulletin (de la semana pasada!), con el que coincido mucho.. tanto es así que hasta me ha motivado a hacer esta entrada en el blog. F.C. habla de la gran aventura que ha supuesto la construcción del LHC, tanto de la maquina como de los detectores. Una gran aventura humana y tecnológica que muchos dudaron en sus comienzos que pudiera convertirse en realidad. Antes de disfrutar imaginando lo que el LHC podrá producir (Higgs de todo tipo, supersimetría, extra dimensiones … y esto solo es una parte de lo que sabemos formular hoy!), F.C. nos propone que disfrutemos con lo que ya tenemos, con la maquina, con los gigantescos detectores.. Esta gran aventura empezó hace mucho, aun recuerdo el primer meeting de fisica del LHC en Aachen en 1990 y el primer meeting sobre propuestas de detectores, en Evian en 1992. Muchas cosas han pasado desde entonces, muchos proyectos se han hecho realidad (otros se quedaron en el camino…), nuevas generaciones de físicos se han formado construyendo este sueño, en el que todos hemos disfrutado (y envejecido! ..). Esto empezó hace casi 20 años.. ahora estamos a las puertas de completar esta empresa, en unas semanas tendremos protones circulando y en otras pocas colisiones. Todo frio frio en la maquina, y caliente caliente en los detectores, en las salas de control, en los despachos… aquí en el CERN y en cientos de lugares en todo el mundo.
Dejadme que os introduzca a CMS (que quiere decir Compact Muon Solenoid). CMS (como ATLAS, LHCb o ALICE) no es solo un gigantesco y preciso detector de partículas.. además de preciso yo lo encuentro precioso (y no solo yo.. esta física nuestra esta dando de si hasta para experimentos artísticos nada despreciables!). CMS mide unos 22 m de largo y tiene un diametro de unos 15 m (pequeñito si lo comparamos con otros, de ahí su nombre de “compacto”) y estas “modestas” dimensiones es porque en el corazón de CMS hay un solenoide superconductor de 4T, de 13 m de largo y 6m de diámetro que permitirá medir el momento de las partículas cargadas con presiones de pocos %. Dentro del solenoide hay de todo.. unos 200 m2 de detectores de micro-tiras de silicio, millones de pixeles, varios miles de cristales de plomo-tungsteno, y también un calorímetro de hadrones de cobre y material centelleador. Y fuera del solenoide, en el hierro de retorno del imán hay 4 estaciones de detectores de muones. Estas estaciones de muones consisten de tubos de deriva, de cámaras de tiras de catados y de cámaras de planos resistivos. Y por cierto, la posición y movimientos de toda esta variedad de detectores estan controladas con precisiones de decimas de mm.
Estas semanas se esta completando la instalación de detectores en CMS (si el proyecto ha exigido mas de una década de diseño, construcción, calibraciones, etc. etc. etc… llevamos ya mas de 4 años con el ensamblaje del detector). Ahora les toca a los pixeles, y al ECAL. El detector de pixeles es la parte más interna y delicada. 66 millones de canales de lectura solo para cubrir un área de detección de aproximadamente 1m2 ..
… y cuando el detector se termine de ensamblar.. enseguida enseguida empezara lo bueno… os seguimos contando!.